Hotel Palacio De Úbeda 5 G.L, Úbeda

El hotel tiene una ubicación ideal en el casco antiguo de Úbeda, lo que permite un fácil acceso a monumentos y restaurantes. Las habitaciones son amplias y cómodas, aunque con algunos detalles que podrían mejorarse. El desayuno no cumplió con nuestras expectativas, y a pesar de la genialidad del servicio, sentimos que algunos aspectos no estaban a la altura de un hotel de cinco estrellas.

El hotel se encuentra en una ubicación ideal en el casco antiguo de Úbeda, lo que facilita el acceso a muchas atracciones y restaurantes. La habitación que tuvimos era bastante espaciosa, aunque un poco anticuada. El servicio fue amable, aunque un poco rígido en ocasiones. La experiencia gastronómica fue decepcionante, especialmente en el desayuno, que dejó mucho que desear. En general, la relación calidad-precio no fue la mejor debido a ciertos inconvenientes.

El hotel tiene una ubicación ideal en el centro histórico de Úbeda, lo que facilita explorar la ciudad. La habitación era amplia y cómoda, y la atención del personal, especialmente de Lidia, fue excepcional. Sin embargo, el servicio durante el desayuno fue decepcionante y la limpieza podría mejorarse. A pesar de los inconvenientes, la experiencia gastronómica fue una de las mejores de nuestro viaje.

El hotel tiene una ubicación increíble en el corazón del casco antiguo de Úbeda, lo que facilita explorar la ciudad. Las habitaciones son amplias y limpias, pero el acceso puede ser complicado y faltan algunos servicios que uno esperaría en un hotel de cinco estrellas. El personal es amable y servicial, aunque hubo algunas dificultades al intentar comunicarnos con ellos antes de llegar. El desayuno fue decepcionante, por lo que no regresaremos.

El hotel está en una ubicación ideal en el centro del casco antiguo de Úbeda, lo cual facilita explorar la ciudad y disfrutar de su rica historia. Las habitaciones eran amplias y contaban con un diseño elegante, aunque la falta de algunos servicios básicos como agua embotellada fue decepcionante para un hotel de cinco estrellas. La experiencia gastronómica fue sublime, con un desayuno mejorable pero una cena excepcional. Sin embargo, la atención del personal dejó algo que desear en ocasiones.